Haz la prueba... vete a cualquier foro de heavy metal, o de rock progresivo y pregunta por los inicios del metal progresivo. Muchos mencionarán a Dream Theater, y no faltará quien mencione a otros como los olvidados Fates Warning. A lo sumo te mencionarán algún otro disco muy anterior, que puede haber influenciado, pero que no acaba de ser metal progresivo. Y ya está. Nunca te mencionan este disco. Y sí, este disco es metal progresivo en estado puro. Metal por sus riffs, por el sonido de guitarra y por la manera de cantar, progresivo no porque simplemente sea intrincado, sino porque las composiciones están realmente cerca del estilo de los grupos clásicos del estilo. "Cuentos de ayer y de hoy" es sin duda un disco adelantado a su género, y por más que pase el tiempo, no acaba de llegar nunca la reivindicación que muchos discos de tal característica acaban logrando.
Ñu con los años se convirtieron en clásicos del rock duro español de los 80. Su fórmula podía variar, desde el hard ochentero de laca y cardado hasta el heavy más clásico, pasando por el folk medieval, pero casi siempre manteniendo una base de rock duro. A esto se sumaba un rasgo crucial: José Carlos Molina, cantante, compositor y único miembro del grupo que se ha mantenido disco tras disco (a veces llegaba a cambiarse la formación completa menos él de un disco para otro) tocaba además la flauta, al más puro estilo de Ian Anderson (Jethro Tull), lo que se convirtió en uno de los rasgos principales del grupo.
Pero lo curioso es que la discografía del grupo empieza con "Profecía", donde la flauta no aparece. Arranca el disco a todo trapo con un brutal riff de violín a manos de Jean François André, que estaría en Ñu durante sus dos primeros discos. Aquí ya podemos apreciar gran parte del estilo del disco: los riffs de guitarra son muy agresivos y durante los solos adquieren un tono muy afilado con cierto regusto bluesero. El bajo además está muy marcado (¡como a mi me gusta!) y se aprecia la herencia de r&b clásico de Jorge Calvo con dicho instrumento (no confundir con el Jorge Calvo teclista que entraría al grupo décadas después). La batería tambíen suena bastante bien, quizá algo opaca, pero a mí me gusta. Hay quien se queja del sonido del disco pero yo lo encuentro más que aceptable a nivel objetivo, y además creo que sienta envidiablemente al disco.
En fin, "Profecía" es un gran tema, intenso y lleno de oscuridad (excelente la tensión que aporta el violín durante las partes cantadas). Lo mejor del tema es el final, cuando la guitarra desaparece y un sutil crescendo sinfónico nos conduce hacia un final magistral. "Preparan" es aún más potente, y además aparece la flauta por primera vez. De nuevo la canción es una joya, puro heavy progresivo pasado de vueltas. André simplemente, está IMPRESIONANTE, la descose durante todo el tema. "Algunos músicos fueron nosotros" es algo más tranquila. Si las anteriores eran muy heavys, esta es más rocanrolera, si las otras hablaban de finales del mundo y batallas, esta habla sobre música, y el tono en general es más desenfadado. Podría decirse que el disco va organizado en bloques: si los dos primeros temas eran oscuros y agresivos, el tercero y el cuarto (que da nombre al disco) son más festivos y con un aire más hippie incluso. "Cuentos de ayer y de hoy" es un llamamiento a la vida sencilla, al campo, un rechazo al humo, es asfalto y el cemento. "Queremos ver limpia la tierra, no la tapéis de alquitrán y hormigón", dice. Todo a ritmo de folk medieval metalizado.
Y el tercer bloque posiblemente sea el mejor (o no, este disco es una joya de principio a fin), el de las dos grandes piezas progresivas. Dos temas extensos, de genial desarrollo, más inspiradas en los grupos clásicos. "El juglar" está muy inspirada en los temas acústicos de Jethro Tull, con la correspondiente dosis de distorsión extra. Más sorprendente me resulta "Paraíso de flautas", que me trae a la mente las ensoñadoras atmósferas de los primeros King Crimson. "El juglar" es solemne, hermoso. Narra el cuento de un extraño que llega a un triste lugar a intentar cambiar las cosas para bien y es rechazado. Mantiene una base muy poco cambiante a lo largo de sus 8 minutos, pero los brillantes solos instrumentales y los cambios de intensidad impiden que resulte aburrida. Con respecto a "Paraíso de flautas"... es un hito dentro del rock progresivo nacional, comparable a las más reconocidas obras como "Abre la puerta" de Triana o "Si todo hiciera crack" de Crack, y capaz de competir perfectamente con muchas obras internacionalmente reconocidas. Sublime. Entrar a describirla es absurdo.
No sé cuantos discos mejores que este se habrán hecho en España, ni cuantos discos metaleros superan a este. En mi opinión, pocos en ambos casos. Tanto este debut, como su sucesor "A golpe de látigo" (1980) me parecen necesarios para el amante del rock en general. El resto de su discografía ya, a gusto de cada uno, pero estos dos son esenciales.
4 comentarios:
joder colega,cada dia escuchas cosas mas raras,¿Krafwert,Abba?¿quien son esta gente?quitale el polvo a tus discos de Skynyrd y dejate de ostias.
Saludos.
Para mí (que no se ofenda el señor javi) el mejor disco de Hard Rock español junto al BARRIOBAJERO de Ramoncín ( si, si el pitbull de la SGAE), AL OTRO LADO de Asfalto, y el primer disco de Leño.
Por favor; escucharlos antes juzgar prematuramente.
Jorge de Asturias
Buenísima la crítica sobre esta primera obra maestra de Ñu que hasta el día de hoy desconocía, algunos temas si, pero no habia hecho el viaje al completo. He disfrutado como un enano!!! Grandioso!!! Otro de esta época que me encanta es el Capitán Trueno de Asfalto!!!
Os invito a que visiteis mi web donde encontrareis muy buen rock en castellano!!!
Este es el mejor disco del Rock de este pais junto con los tres primeros de Triana y los de los santanderinos Bloque,a dia de hoy no se ha hecho nada mejor ni creo que se haga nunca.
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